sábado, 17 de noviembre de 2007

Secretos, secretillos, secretones.





"Shh!...., no lo digas, por favor no le cuentes a nadie, que nadie sepa....shhhhhh...."
Secretos. Todos los tenemos, de distintos "pesos", chicos, grandes, horribles, sucios, naif, vengonzosos, endemoniados, divertidos, tontos.....da igual, todos llevamos algo que no queremos, o no podemos compartir, o mejor dicho "no debemos compartir". La clave del secreto es que devela un aspecto de nuestra vida que claramente no queremos que nadie sepa, y cuando algo se filtra...uf!, sin comentarios, somos capaces de todo con tal de callar a esa fuente.

Los secretos más complejos agobian, no dejan dormir, se enquistan en la almohada recordándonos cada noche lo "mal" que nos hemos portado.
Otros secretos se esconden en nuestra sonrisa y nos alegran la vida, nos van diciendo a cada minuto que tenemos derecho a divertirnos...pero no por eso dejan de ser lo que son....secretos.
¿Con quién compartir un secreto?, con aquellos que sabemos nunca y bajo ninguna circunstancia los contarán, y no se engañen, no son necesariamente nuestros amigos, quizás es alguien más lejano y menos involucrado.
Porque para contar un secreto, hay que tener la tremenda necesidad de catarsis, sino para qué...para que nos juzguen, bueno, puede ser, en la medida que "algo" dentro de nosotros nos diga que "eso está mal", y no seamos capaces de corregir nuestra acción.
En fin, les dejo el tema expuesto....¿los míos?, ¿quieren que diga algo de los míos?...ja!...shhhhh....nunca lo sabrán......


Leonor
Para mis amigas y amigos secretudos.